Con la instalación de 80 multicorreladores en diferentes sectores de la ciudad, la J+ ha detectado y reparado alrededor de 20 fugas en la red de agua potable, lo que ha permitido evitar el desperdicio del líquido.
De esa cifra, 13 fueron detectadas en condominios que existen en el sector de San Lorenzo, cuyos medidores se encuentran instalados uno cerca del otro. “También encontramos dos tomas reconectadas de forma irregular, lo que lleva a pensar que son los trabajos que realizan los ciudadanos para estas conexiones los que generan las fugas”, explicó el arquitecto Brandon Ávila, encargado del monitoreo del sistema en la Junta de Agua y Saneamiento de Juárez.
Estos dispositivos son colocados de manera estratégica en la red hidráulica, se correlacionan entre sí y arrojan alertas a manera de “ruidos”, que son posiblemente fugas en la red hidráulica.
“Los dispositivos graban los ruidos de las posibles fugas entre las 3:00 y las 4:00 de la mañana, que es la hora en la que menos gente utiliza el agua potable. Si existe alguna fuga, ese ruido va a persistir hasta esa hora”, agregó el arquitecto.
Actualmente, los 80 multicorreladores adquiridos por la J+ con una inversión de más de 1.3 millones de pesos, se encuentran instalados en la colonia Cuauhtémoc, Zona Centro, Infonavit Casas Grandes y en el sector de San Lorenzo-Frontera. Desde su instalación, se han analizado 47,236.57 metros de líneas de agua potable.
En la misma plataforma se monitorean los 70 recolectores de datos que recientemente adquirió la J+ para controlar la presión del agua potable que llega a los usuarios. En estos aparatos, que por primera vez se utilizan en México, se invirtieron más de 2.5 millones de pesos.
Los recolectores de datos son tecnología de uso militar y totalmente herméticos, cualidad que los protege en caso de que llegara a inundarse la caja de válvulas donde se instalan. “La información que arrojan la utilizamos para calibrar el modelo hidráulico de la sectorización para detectar cuál es mi punto crítico. Esta información se comparte con Agua Potable para regular la presión que llega a los usuarios, que debe ser de alrededor de 30 libras”, explicó la ingeniero Paola Moreno, jefe del Departamento de Eficiencia Física.
Esta tecnología permite mantener monitoreada la red de agua potable casi en tiempo real para evitar fugas y controlar la presión que llega a los hogares, lo que facilita la pronta respuesta ante cualquier anomalía detectada.