Bajo la administración del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EU (HHS), Fort Bliss recibió a los primeros 500 menores migrantes que cruzaron solos la frontera –todos varones de entre 13 y 17 años– que alojará de manera temporal mientras se reunifican con sus familiares en Estados Unidos.
HHS hizo énfasis a través de un comunicado que será la agencia federal la que se hará cargo de los menores, por lo que los militares no serán responsables por su bienestar.
La instalación está siendo administrada por el HHS y “no tendrá ningún impacto en la capacidad del Departamento de Defensa para llevar a cabo su misión principal o en la preparación militar”, precisó.
El arribo de los menores migrantes a la base militar local –anunciado la semana pasada por el presidente Biden– se dio horas después de que el congresista republicano Tony Gonzales visitara el lunes el nuevo refugio temporal.
La instalación está ubicada dentro de los terrenos de Fort Bliss, entre la Puerta de la Constitución y la Puerta de Old Ironsides, a la salida de Spur 601.
“El sitio de admisión de emergencia proporcionará los estándares de atención requeridos para los niños, como dotar de dormitorios limpios y cómodos, comidas, artículos de tocador, lavandería y acceso a servicios médicos”, señaló HHS a través de un comunicado.
En el centro, cuyo acceso está hasta el momento restringido a los medios, se aplicará un protocolo de salud para la detección de Covid-19. Se implementará que todos los internos sigan las pautas de los Centros de Control de Enfermedades (CDC) para prevenir y controlar los males transmisibles.
Lo ‘inspecciona’ republicano
El congresista republicano Tony Gonzales visitó el lunes el nuevo centro de migrantes ubicado en las instalaciones de Fort Bliss, donde se instalaron alrededor de 5 mil camas para albergar a niños no acompañados.
En sus redes sociales, el legislador confirmó que los menores llegarían el martes.
Gonzales –quien representa al Distrito 23 de Texas, que abarca desde San Antonio hasta Socorro, en este condado– visitó Fort Bliss para “obtener información actualizada sobre las operaciones, reunirse con la Fuerza de Tarea Conjunta Norte y ver el nuevo refugio para menores no acompañados que se está instalando allí”.
“Visité Fort Bliss para ver el nuevo refugio para menores no acompañados que se encontraba allí. La instalación en Fort Bliss está programada para recibir a niños el 30 de marzo y tendrá capacidad para 5 mil camas para niños no acompañados que crucen la frontera”, dijo el congresista en Twitter.
El 24 de marzo, el Departamento de Defensa aprobó una solicitud de asistencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) para albergar temporalmente a niños migrantes no acompañados en Fort Bliss.
“En respuesta, los funcionarios de la base dijeron que estaba disponible de inmediato el lado Este de la instalación para que HHS establezca una instalación que cumpla con sus requisitos. Si bien Fort Bliss continuará brindando seguridad para la instalación en su conjunto, no tendrá un papel específico en la seguridad o en la ejecución de sitios potenciales de HHS. El impacto en la comunidad de Fort Bliss será mínimo”, dijo Allie Payne, portavoz de Fort Bliss.
Fort Bliss es el séptimo refugio de afluencia de emergencia en Estados Unidos que se abre este año, y el primero de dos en asociación con el Departamento de Defensa.
“La apertura de otra instalación para menores no acompañados muestra cuán grave es realmente esta crisis, y no se está desacelerando en el corto plazo», dijo el congresista Gonzales.
“Estamos viendo un aumento insostenible de familias, personas y, especialmente niños no acompañados. Como padre de seis, me rompe el corazón ver a los niños hacer un viaje tan peligroso solos para intentar tener una vida mejor. La administración de Biden debe intervenir, poner fin a su retórica de fronteras abiertas y proporcionar a nuestros agentes de la Patrulla Fronteriza los recursos que necesitan para continuar haciendo su trabajo”, agregó.
También va a Juárez
Asimismo, el congresista Gonzales visitó la ciudad vecina donde también acudió a un centro de detención de migrantes para “conocer la situación de las familias”.
“Vine a Juárez, México, a pocos kilómetros de TX23, para visitar una instalación que acoge a familias que huyen de sus países de origen. También quería ver de primera mano lo terrible que es en el lado de México. Las familias que vimos son más que estadísticas. Son como tú y yo”, dijo el congresista.
“Arreglar nuestra crisis en la frontera debe ser un esfuerzo binacional entre Estados Unidos y México. Los peligros a los que se enfrentan estas familias en su viaje desde lugares como Haití, Honduras y Cuba son aterradores. En este momento, nada está cambiando y nuestro sistema roto sólo fomenta estos viajes. Nuestras naciones necesitan hablar y trabajar juntas en todos los niveles. Esta es una crisis humanitaria y es hora de que nuestros líderes actúen”, finalizó.